TRASTORNOS DEL COMPORTAMIENTO DE LOS NIÑOS SUPERDOTADOS

Después de mucho tiempo vuelvo a escribir, hoy especialmente quisiera tocar el tema de la conducta en los niños superdotados, ¿por qué? estamos en el inicio del cole ya llevamos algo más de un mes, al parecer mi hija ya ha tenido una semana dura de "mal comportamiento" en clase; es una niña fantástica, ayuda, colabora, es la voluntaria para cualquier cosa que pidan los profesores pero... le cuesta controlar sus impulsos cuando algo considera injusto, inapropiado o simplemente algún compañero le molesta.

Con los niños superdotados nos encontramos que por su perfil de personalidad como también por su inteligencia pueden:

• ser excesivamente impacientes cuando quieren alguna cosa
• ser especialmente susceptibles cuando se les corrige, les cuesta aceptar los errores, sobre todo si ellos creen tener la razón.
• querer ser el centro de atención, nos encontramos con niños que absorven mucho, necesitan mucha dedicación de padres, profesores...
• enfadarse de manera desproporcionada
• interrumpir más de la cuenta por su afán de curiosidad o por querer protagonismo.
• ser grandes negociadores, intentan negociar los límites establecidos con sus padres.
• ser dictadores, intentan imponer sus normas a toda costa les cuesta aceptar las de otros, creen que las suyas son mejores.

¿Qué hay que hacer para lograr mejorar el comportamiento de los niños superdotados cuando empiezan los problemas en el colegio? 

Es difícil, cada niño es un mundo, además nos encontramos con los profesores y con los padres, cada situación es diferente, pero lo más importante es la cohesión entre las partes, el trabajo conjunto y mucha comunicación.

Yo he tenido mucha suerte con la profesora, entiende a mi hija y parece que la sabe llevar, además, en cuanto empezó el mal comportamiento rápido me escribió una nota para hacérnoslo saber y nosotros pudimos hablar con nuestra hija. Es importante que nuestros hijos vean que "formamos parte" de ese trípode en el cole, que nos interesamos por lo que pasa y que estamos ahí para lo bueno y para lo malo. 

La conducta de mi hija ha cambiado, ahora ya está más tranquila y la profesora contenta con ella.

Una vez corregida la conducta toca el estar encima para controlar que académicamente mi hija este correctamente llevada y no tengamos otro bache de conducta.